Sentado aquí, frente a la compu, recuerdo cuando me reunía con mis amigos
a contar cuentos en el Colegio Médico de la ciudad de Barquisimeto. Venezuela.
Nos parábamos frente al estrado y venciendo el miedo escénico comenzamos a narrar los cuentos que más nos agradaban.
Lo recuerdo como si estuviera ocurriendo ahora.
Me gustaban cuentos con mensajes y connotaciones espirituales y por eso me aprendía de memoria, algunos de la colección de Anthony de Mello.
Realmente lo disfrutaba y lo disfruto ahora que lo recuerdo.
Se me ocurrió uno que quiero compartir con Uds. Y que lo titulo:”La Primera Vez que Apareció El Ego.”
Se narra así:
“Un hombre y una mujer ambos recién formados, vivían en un paraíso celestial, rebosantes de dicha, amor, salud , abundancia y en comunión constante con su Hacedor.
Un día, la mujer estaba tranquila y escuchó un susurro. Le extrañó el sonido, puso mayor atención; pero no escuchó nada más.
Un momento más tarde volvió a escuchar un susurro, que la llamó por su nombre. Estaba serena, aún por ser la primera vez que lo escuchaba, porque en ese momento no conocía lo que llamamos temor.
La voz le dijo, nombrándola, ¿Es verdad, que no tienes ninguna limitación en este lugar tan hermoso?
La astucia de esa voz, se muestra al decir la palabra limitación; ya que hizo que la mujer se enfocara en la única limitación que tenía y dijo: ‘ Nuestro Hacedor, nos dijo que no comiéramos de esa fruta” señalándola.
La voz le preguntó “ ¿Y que pasa si comes de ese fruta?”
Ella respondió:” Si comemos de ese fruto comenzaremos a juzgar, sabiendo lo que está bien y lo que está mal”
La voz dijo:” Cuando comas de esa fruta llegarás a ser como tu hacedor”
La mujer se dió cuenta de que ya era como su Hacedor porque estaba en comunión con El y no había necesidad de desobedecer, comiendo la fruta para lograr ese propósito. Y le preguntó a la voz: Quién eres?
La voz respondió: “Soy el Ego y cuando comas de ese fruto serás más importante, inigualable, magnífica , muchísimo más feliz …y siguió enfocando el color de la fruta, su forma, su sabor agradable como un excelente vendedor .
Tanto insistió que la mujer tomó la fruta y se la comió. Luego se lo dio al hombre.
Y a partir de ese momento surgió la separación, la tendencia a juzgar casi sin cesar y surgieron las divisiones.
Ese fue el día en que apareció el Ego por primera vez”
Y colorín colorado, este cuento se ha terminado.
Hernán
En las próximas entregas seguiremos compartiendo sobre el tema del Ego.
Mi Cuento :La 1ra. Aparición del EGO.
Cuestionando la Infelicidad.
En abriendo y cerrando paréntesis, les introduje en el proceso de El Trabajo ideado por Byron Katie. En este tema voy a presentarles una pequeña muestra del Método de la Opción creado por Bruce Di Marsico (1942-1995) y difundido mayormente por Barry Kaufman, muy conocido por ser el primer caso de tratar exitosamente el autismo de su hijo, con la actitud de amar es ser feliz con e imitar los movimientos de su hijo autista, entre otros procesos.
Para iniciar imaginémonos una situación que nos trae infelicidad, sufrimiento o tensión.
¿Cómo te sentirías si tu situación nunca cambia, si siempre se mantiene como está ahora?
Una cosa es querer algo de una situación y otra, completamente diferente es ser infeliz porque no se tiene eso que se quiere.
Un motivo para sentirse desdichado puede ser el temor a que eso sea siempre de esa manera, porque no se ha visto ningún cambio.
¿Por qué crees que si hasta ahora no ha habido cambios eso significa de que siempre será de esa manera?
Posiblemente sintamos alguna confusión al intentar responder a esa pregunta porque:
Primero, no la habíamos hecho anteriormente,
Segundo, nos damos cuenta de que no somos adivinos con una certeza del 100%,
Tercero, podemos recordar situaciones en que pensábamos de que iban a persistir y que cambiaron a nuestro favor y
Cuarto, podemos recordar que temimos muchas situaciones que podían pasar y que afortunadamente, no ocurrieron (la gran mayoría de las veces).
¿Qué temo que podría suceder si no fuera infeliz acerca de esta situación?
Las respuestas, aunque un poco diferentes, apuntan a que, uno no sería capaz de hacer algo en relación a esa situación; es decir, que siendo infeliz, es una manera de mostrar que se quiere que cambie la situación.
¿Por qué creo que tengo que ser infeliz para lograr lo que quiero?
Porque…. Porque si no estoy infeliz, estoy demostrando de que no me importa.
¿Si la situación no cambia y no muestras infelicidad, eso significa que no te importa, de que eres indiferente?
Muy buena pregunta, ¿verdad? Se nos ha enseñado que sentirnos tenso o sufrir ante algo, significa que nos interesa lo que pasa en esa situación, de que estamos pendiente, de que cuidamos de eso e incluso de que amamos.
¿Es esa creencia útil?
¿Necesariamente tenemos que sentirnos mal para que una situación cambie a nuestro favor? ¿Y si no cambia, el sentirnos peor hasta afectar nuestra salud, determinará que cambie para beneficiarnos?
Podemos entender como tratamos de usar el miedo u otra emoción/sentimiento que etiquetamos de negativo, para motivarnos y también entender que, el miedo al futuro
desvía nuestra atención de lo que pasa aquí y ahora.
Podemos darnos cuenta de que cuando hablamos de expectaciones, de deberías o no deberías, de que se supone o no se supone, entramos en un estado de necesitar que las cosas sean de cierta manera para que ser feliz. Y si eso no es así, nos sentimos miserable, ansiosamente mirando lo que tememos, mientras frecuentemente pasamos por alto las cosas buenas que tenemos.
Al entender como usamos esas emociones negativas para motivarnos, pueden desaparecer
esas creencias y esas negatividades.
Cuando eso ocurra, llegaremos a decir por experiencia propia lo que escribió Pablo en su carta a los Filipenses 4:11 “He aprendido a estar satisfecho en cualquier situación en que me encuentre” *
En otras palabras, aprender a estar contento en las buenas y en las malas.
Hernán.
* Biblia Nueva Versión Internacional
Emociones, Sentimientos y Pensamientos (Parte 2).
Después de cerrar el paréntesis, continuemos con el tema de Emociones, Sentimientos y Pensamientos.
Le enseñamos al extraterrestre científico (XTC) lo que tenía que hacer para sentir una emoción que etiquetamos de negativa.
También le podemos añadir que, después de repetir la receta para sentirse mal varias veces, basta con recordar algún elemento de esa receta para comenzar a sentirse mal. Por ejemplo, al bajar los hombros, encorvar la columna, dirigir la mirada hacia abajo puede desencadenar sentimientos y emociones negativas. Esto lo denominan acondicionar emociones o anclaje, según la terminología de la Programación Neurolinguística (PNL).
Aquí, XTC nos dice:” Gracias, por advertírmelo. Una vez es suficiente. Eso se siente tan, tan mal, que no pienso repetirlo. Ahora dime como uno no siente más eso que me acabas de enseñar”
Ahora le comienzas a dar la receta para sentirse bien.
“Busca un pensamiento positivo; es decir, un pensamiento de que quieres que ocurra o recuerda escenas en donde ocurrieron los resultados que deseabas”
“Concéntrate en esos pensamientos, aumenta el tamaño de las imágenes, dale más luminosidad, aumenta la nitidez de los colores de esa escena agradable que estás viendo con los ojos de tu mente; nota las sensaciones que vivencias, aumenta su intensidad, sácale todo el jugo a ese pensamiento para sentirse bien y luego busca otro para repetir el mismo proceso.”
“Buscar otro pensamiento puede ser fácil porque parece, que generalmente, un pensamiento positivo atrae otro y otro. Disfruta el momento, disfruta de esas sensaciones agradables y de gozo.”
Cuando has hecho un buen trabajo con tus instrucciones puedes ver en su lenguaje corporal, lo contento, lo entusiasmado que está; puedes apreciar su excitación y alegría y al mismo tiempo, puedes apreciar el buen trabajo que estás haciendo con XTC
Lo ves disfrutando y le dices:” Si quieres puedes colocar los tres dedos juntos [Las manos de este XTC se parecen a las nuestras ;-)] y cada vez que quieras sentirte bien, súper bien, como estás en estos momentos, simplemente pones estos dedos en la misma posición y eso te ayuda a revivir esa sensación de bienestar”
XTC te responde:”WOW, chévere, padrísimo, qué suave, ahhh!!!. Esto si es sabroso, delicioso.”
Como lo ves feliz, antes de irte le dices:”Ya sabes lo que tienes que hacer cuando quieras sentirte bien y cuando no quieras sentirte bien.”
El te responde:”Haz sido un buen instructor. Te diré que esto se siente tan rico, tan extático, tan bien que no pienso volver a sentirme mal”
No sé si te has dado cuenta de que al explicarle al XTC como sentirse bien, comenzaste a sentirte mucho mejor, más positivo y si al explicarle como poner los tres dedos para darle una explicación detallada a tu alumno de esta ocasión, sabes , también, como facilitar este proceso de sentirse bien en ti mismo.
XTC tomó la decisión de seguir sintiéndose bien. Será tan fácil para nosotros tomar esa misma determinación: La decisión de sentirnos bien suceda lo que suceda?
Hernán.
Espero sus aportes y/o preguntas haciendo clic en comentarios
Cerrando el Paréntesis.
Después de comenzar a cuestionar esos pensamientos que nos hacen sufrir o que crean tensión y que consideramos como hechos sin discusión, con las dos primeras preguntas, podemos comenzar a sentir un cambio que puede ser imperceptible o muy evidente. Existe una gradación en ese cambio.
Para la persona que está aferrada a un pensamiento como:”no soy lo suficientemente buena en lo que hago”, ese pensamiento es un hecho que no se puede refutar; ya que, incluso, puede darte pruebas del pasado, que apoyan su veracidad.
Por eso, cuando se responde rápidamente, sin meditar, a la pregunta: ¿Es verdad que no soy lo suficientemente buena en lo hago? La respuesta es: Sí.
Después de ese si, puede darte las pruebas: “fíjate que cuando…..no me salio nada bien. En esta ocasión en que…. Sucedió lo mismo, etc”.
Es importante anotar esas pruebas, esas conclusiones que apoyan al pensamiento original, para hacerle también las 4 preguntas de El Trabajo.
Cuando nos hacemos la primera pregunta, una y otra vez, esperando que la respuesta venga del interior y no del recuerdo, se puede experimentar un milagro.
Si la respondemos un poco más rápido; la segunda pregunta vuelve a cuestionar ese pensamiento de forma tal que incita a la duda y luego nos lleva a la verdad.
¿Tienes la certeza absoluta (al 100%) de que X es verdad?
Tienes la certeza absoluta de que “no soy buen@ en lo que hago?
Cuando se quiere conocer la verdad, al meditar para responder a esata pregunta, se puede sentir como que se comienza a soltar un poco, algo o mucho esa atadura a un pensamiento que nos causa tensión o sufrimiento y antes se consideraba como un hecho, como una verdad irrefutable.
La tercera pregunta nos lleva a experimentar lo que le hicimos al extraterrestre científico XTC). Es hacer una lista de las reacciones que tenemos cuando consideramos el pensamiento X; es decir, las reacciones corporales, emocionales y mentales.
Esa pregunta es: “¿Cómo reacciono cuando tengo ese pensamiento X?
¿Cómo reacciono cuando pienso:“ No soy lo suficientemente bueno en lo que hago?”y se anotan todas las reacciones que sentimos.
La cuarta pregunta es una que nunca había considerado antes. Es una invitación a considerar algo inaudito, realmente algo imposible de pensar cuando se tiene un pensamiento al que estamos atados o aferrados.
Es una pregunta tan importante , para mí, que quiero terminar este compartir con ella, no sin antes decirle, que Byron Katie escribió un libro sobre este proceso que se llama: “Amar lo que es”.
Hay un grupo en donde se puedes tener información mientras consigues el libro. Lo creó Yolanda Zumaeta y lo dirigen ella y Laura Saavedra. Allí puedes leer, hacer preguntas y recibir la facilitación, que permite experimentar los beneficios de EL Trabajo. He hecho algunos aportes en el grupo y en las referencia pondré unos links para que te informes más.
Continuemos.
Ya hemos hecho tres preguntas para cuestionar el pensamiento que hemos pillado o identificado como causante de tensión o sufrimiento.
Talvez, ya hemos comenzado a dudar de nuestra conclusión de que era un hecho irrefutable y nos hemos dado cuenta de cómo reaccionamos cuando ese pensamiento aparece en nuestra mente.
Las dos primeras preguntas , tal vez la hemos hecho en otros contextos, como por Ej.:” ¿Es verdad que fulanit@ hizo X?”
La tercera la hemos respondido automáticamente sin hacerla, como por Ej.: “Sabes, me siento triste porque…”. “ Siento una sensación en el pecho y lloro, lloro desde que …” etc.
La cuarta no la habíamos hecho antes; al menos, yo no.
Para responderla, nos tranquilizamos, nos relajamos, dejamos que surja la respuesta y nos quedamos en esa vivencia, sin palabras, solo experimentándola.
La cuarta pregunta es: ¿Qué o quién sería sin el pensamiento X?
O en tiempo presente. Qué o quién soy sin ese pensamiento?
Hernán.
Referencias:
Link al grupo:http://groups.msn.com/HaciendoTheWorkdeByronKatie
Link de mensajes recomendados:
Información Básica.
http://groups.msn.com/HaciendoTheWorkdeByronKatie/general.msnw?action=get_message&mview=0&ID_Message=1281&LastModified=4675597178357591972
Aclaraciones y Recomendaciones.
http://groups.msn.com/HaciendoTheWorkdeByronKatie/general.msnw?action=get_message&mview=0&ID_Message=1284&LastModified=4675597241369900258
Información Interesante.
http://groups.msn.com/HaciendoTheWorkdeByronKatie/general.msnw?action=get_message&mview=0&ID_Message=1283&LastModified=4675597240376044826
Abriendo Paréntesis.
Antes de que le expliquemos al extraterrestre científico (XTC) como es que uno se siente bien, quiero compartir otro proceso que es muy útil cuando queremos dejar de sentir tensión o sufrir.
Pudimos notar que mientras más se piensa en lo que no se quiere, sentimos sensaciones físicas y emociones que no son agradables.
Al sentir algo no agradable podemos preguntarnos: ¿En qué estoy pensando?
Algunas veces, la respuesta no viene rápidamente; pero al seguir haciendo la pregunta; mientras nos concentramos en esas sensaciones desagradables, el pensamiento aparece y lo podemos identificar.
Supongamos que identificamos el pensamiento X ; donde X significa el pensamiento que tenemos y que para ilustrar aún más lo que quiero explicar, vamos a suponer que X es el pensamiento:"No soy lo suficientemente bueno en lo que hago".
Cada vez que se piensa en X sentimos una serie de reacciones físicas, emocionales e imágenes mentales no agradables. Y eso es debido a que estamos aferrados a ese pensamiento porque lo consideramos como un hecho, como una verdad irrefutable.
¿Qué podemos hacer con el pensamiento X para poder sentirnos mejor?
La respuesta es cuestionar ese pensamiento.
¿De qué manera?
Conozco dos maneras de cuestionar pensamientos o creencias que son el Método de la Opción y el método de Byron Katie denominado El Trabajo.
Personalmente prefiero El Trabajo por lo sencillo y por lo duplicable. Es fácil de aplicar en uno mismo y en otros.
Cuando estamos aferrados a un pensamiento porque creemos que es una verdad irrefutable, estamos dispuestos hasta dar la vida por demostrar su veracidad; aunque nos haga sufrir.
El Trabajo de Byron Katie consta de cuatro preguntas principales y otras accesorias que permiten quitarle poder a ese pensamiento que nos lleva a sufrir.
La primera pregunta comienza a "sacudir" la veracidad de lo que consideramos como un hecho. Es como intentar mover un tronco que está bien enterrado.
Imagínense preguntándose ante un pensamiento que consideramos como un hecho sin discusión lo siguiente: ¿Es eso verdad?
Si lo respondes rápidamente, dirás un si rotundo.
Recordemos que, si queremos liberarnos de los efectosnegativos de un pensamiento que nos limita, podemosrepetir esa pregunta, lentamente, meditándola. hasta que surja la respuesta desde nuestro interior.
Ejm.: ¿Es verdad que “no soy lo suficientemente bueno en lo que hago"?
La segunda pregunta nos lleva a considerar de nuevo al pensamiento X, por si acaso hemos respondido rápidamente la primera pregunta. Si nos hacemos esta pregunta, manteniendo el objetivo de conocer la verdad última y liberarnos, va a crear un poco, algo o mucha duda en ese pensamiento que considerábamos irrefutable y comienza a perder su poder limitante y creador de sufrimiento; ya que comenzamos a desapegarnos de él.
La pregunta es: ¿Realmente, tienes la certeza absoluta (al 100%) de que ese pensamiento es verdad?
Ejm.: ¿Tengo la certeza absoluta de que es verdad que “no soy lo suficientemente bueno en lo que hago"?
Comiencen hacerse esas preguntas al sentirse mal porque se cree en un pensamiento limitante que nos causa tensión o sufrimiento, para que vivencien su poder.
Las dos preguntas restantes se explicaran en la próxima entrega para cerrar el paréntesis.
Hernán
