Renovación de la Mente

"Sean transformados mediante la renovación de la mente" Romanos 12:2

¿Cómo se renueva la mente?

Antes de responder a esa pregunta, vamos a ponernos de acuerdo en las definiciones de renovar y mente.

Vamos buscar el diccionario. http://buscon.rae.es/draeI/

-Renovar:
1. tr. Hacer como de nuevo algo, o volverlo a su primer estado. U. t. c. prnl.
2. tr. Restablecer o reanudar una relación u otra cosa que se había interrumpido. U. t. c. prnl.
3. tr. Remudar, poner de nuevo o reemplazar algo.
4. tr. Sustituir una cosa vieja, o que ya ha servido, por otra nueva de la misma clase. Renovar la cera, la plata.
5. tr. Dar nueva energía a algo, transformarlo. Este autor renovó el teatro de la época.
6. tr. Reiterar o publicar de nuevo.

Me gusta la acepción 5.

-Mente:
1. f. Potencia intelectual del alma.
2. f. Designio, pensamiento, propósito, voluntad.
3. f. Psicol. Conjunto de actividades y procesos psíquicos conscientes e inconscientes, especialmente de carácter cognitivo.

Voy a usar la acepción 3.

Cuando hay muchos conceptos abstractos, me gusta usar analogías o metáforas como herramienta para acercarme a lo que quiero dar a entender.

Muchas veces hablamos de renovar una habitación, refiriéndonos a que la queremos transformar, que queremos hacer cambios para hacerla más atractiva y sentirnos muy bien allí.

Esa habitación o casa es como si fuera la mente y lo que esta allí dentro son los pensamientos.

Algunos pensamientos son muy queridos estamos apegados a ellos, a otros no, no importan que se vayan y a otros ni lo vemos porque no son de nuestro gusto. Más o menos de la misma manera en que tratamos a los objetos de esa habitación o casa que queremos transformar.

Lo que pasa con nuestras mentes es que nos apegamos a pensamientos que nos hacen sufrir, son muchísimos y como muestra escribo unos pocos:

“Dios no me escucha, Ella debe entenderme, La vida es injusta, las personas son peligrosas, Algo debe estar equivocado en mí”.

No nos damos cuenta de que, es ese apego lo que nos hace sufrir.

¿Cómo podemos transformar esos pensamientos?

Fácil no es, porque estamos tan apegados a ellos, que no nos damos cuenta de ese apego y lo defendemos tanto que preferimos sufrir que dejarlos ir.

Bueno, una manera es cuestionar esos pensamientos y otra más radical, es contrastarlo con el pensamiento opuesto y buscar ejemplos de que ese pensamiento contrario podría ser también verdadero.

Ejemplo:“Dios no me escucha” se transforma en “Dios me escucha” y se buscan experiencias de que eso es verdad.

“Ella debe entenderme” se transforma en “ella no debe entenderme”; “la vida es injusta”, en “la vida es justa”; “las personas son peligrosas” en “las personas no son peligrosas”.

Lo importante es buscar ejemplos de uno mismo, en la vida pasada y actual, en que la inversión del pensamiento también es verdad. Mientras más experiencias mejor. Unas tres o más vivencias.

Recuerden que no es fácil y de lo que se trata es desapegarnos un poquito, mucho o totalmente de un pensamiento que causa tensión y sufrimiento.

Este es una muestra pequeña de un proceso para liberarnos del pensamiento que trae tensión o sufrimiento que enseña Byron Katie y que ella denomina EL TRABAJO. Ver: http://www.thework.com/espanol.asp

El resultado de esta transformación de la mente es comprobar cúal es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta o al menos, para los que no creen en esas cosas espirituales, sentirse aquí y ahora, bien o magníficos .

Hernán.